La memoria colectiva es la fuente de sabiduría de un pueblo. Nos ayuda aprender de los errores, nos permite valorar lo que tenemos y a construir el futuro rescatando y comprendiendo el pasado en el presente. La memoria es fundamental para reconocer la identidad de nuestra sociedad y para autoreconocernos como individuos pertenecientes a ella.
En Argentina, cada 24 de Marzo se conmemora el “Día Nacional por la Memoria, la Verdad y la Justicia”. En esta fecha se recuerda el último y más sangriento golpe de Estado, instaurado por las Fuerzas Armadas Argentinas e incitado por orden de las políticas económicas y medidas de seguridad de los Estados Unidos. Durante el período en el cual este régimen militar rigió en el país (1976-1983) se produjeron innumerables crímenes, asesinatos, violaciones, desapariciones, torturas, apropiación de bebés y desmantelamiento de las principales instituciones del Estado.
A partir del 2003 el gobierno nacional ha puesto énfasis en el juzgamiento de estos crímenes promoviendo los juicios de la memoria y prácticas positivas de Derechos Humanos, tratando de mitigar el ultraje y el dolor del pueblo Argentino.
No obstante, en el día de la memoria también nos parece importante seguir rescatando a la sociedad del olvido, en un acto de concientización, traspolando todos aquellos crímenes de lesa humanidad a la época de la esclavitud:
El número de africanos y africanas esclavizados/as que fueron embarcados hacia la Argentina durante el proceso de colonización y trata esclavista fue de un total de 60 millones de personas, de los cuales, sólo una tercera parte sobrevivió al desarraigo. A esto sumémosle que, una vez llegados, eran sometidos a condiciones de vida feroces y a todos los crímenes de lesa humanidad, pues, como no eran considerados personas, no tenían derechos. Tuvieron que soportar que sus esclavistas fueran dueños de su vida y su muerte, también enfrentaron hambre, desnutrición, violaciones, despojo cultural e identitario y, de la misma forma, soportaron la apropiación de sus hijos, los cuales eran vendidos en el mercado de personas esclavizadas.
Tampoco olvidemos el continuo flujo de afrodescendientes que siguió llegando a estas tierras una vez finalizada la esclavitud.
Otro fuerte contingente de afrodescendientes llegó junto con los inmigrantes europeos entre 1880 y 1950, y, al igual que estos, fueron protagonistas en las luchas de organización social y sindical del país. Muchos otros, además, dieron su vida por la democracia Argentina como militantes políticos durante la última dictadura militar. Aunque así mismo, por el contexto fascista de la época, los afrodescendientes también fueron secuestrados, torturados y asesinados por el sólo hecho de ser “negros”, así llamados en la habitual jerga cosificadora.
Pero esto no termina allí, pues los afrodescendientes seguimos sufriendo la vulneración de nuestros Derechos Humanos. La mayor parte de los afrodescendientes de la Argentina viven en condiciones de alta vulnerabilidad social, por debajo de la línea de la pobreza, con bajos niveles educativos e inserción social y laboral, sufriendo todavía el peso del racismo, la xenofobia y la discriminación, ya sea bajo la forma del gatillo fácil o el concepto de portación de cara, que fomenta la represión policial.
Es entonces que aquí vemos la necesidad de que el gobierno incorpore, a estas políticas de Derechos Humanos, la visibilización de nuestros ancestros Afrodescendientes y africanos/as quienes, al igual que los pueblos originarios y los contingentes europeos, forman parte de la identidad Argentina. Es importante reconstruir esta parte silenciada de la historia, reivindicar el hecho de ser afrodescendiente en Argentina y romper con las barreras de exclusión, racismo y discriminación que operan injustamente sobre nuestros Derechos Humanos.
Hoy, nosotros los afrodescendientes, también estaremos presentes en Plaza de Mayo para seguir reconstruyendo la memoria del pueblo argentino bajo la consigna “Memoria, Verdad, visibilidad y Justicia” , conmemorando tanto el golpe del 76’, como nuestro rol histórico dentro de la sociedad Argentina.
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